domingo, 29 de julio de 2018

- RESEÑA - Warcross, de Marie Lu.







Jugadora

Cazadora

Hacker

Títere
...

    Así aparecen esas potentes palabras flotando como códigos en la colorida portada en español, bajo el logo gigante de Warcross, el último bestseller de Marie Lu, una de mis autoras favoritas.

Si bien al comienzo del libro se parece entrever cierta reminiscencia con la novela conocidísima de Ready Player One, al adentrarnos en la historia se nota claramente que todo se dirige hacia otra dirección.

Marie Lu nos presenta un mundo futurista; una distopía en donde la realidad virtual es un factor importante para la sociedad. Dicha innovación tecnológica recibe el nombre de Neurolink, un sistema creado por Hideo Tanaka, un joven de 21 años, dueño de la empresa multimillonaria Henka Games. El Neurolink es una tecnología que permite a las personas conectarse a una red infinita de realidad virtual a través de unos simples lentes que utilizan los impulsos eléctricos del cerebro.

Warcross es el nombre del videojuego donde las personas tienen la oportunidad de generar sus propios avatares, ganar puntos, experiencia y mejorar sus habilidades para convertirse en los jugadores más codiciados de la red. El juego se ha vuelto tan popular que se desarrollan torneos internacionales con miles de espectadores y jugadores a la expectativa de poder ser elegidos para participar.

Aquí es donde entra el personaje de Emika Chen, una hacker brillante de 19 años con el cabello arcoíris que, en la desesperación de conseguir algo de dinero, sabotea el juego durante una de las partidas llamando la atención de todos, en especial de Hideo – el mismísimo creador.


“Busco lo que rompe el esquema, el clavo que sobresale”.

(Lu. 2017, pág. 18)


Hasta aquí vemos a la protagonista intercambiando roles de cazadora a cazada, y luego a cazadora otra vez. A Hideo le parecen de lo más interesante las habilidades de Énika, por lo que la invita a Tokyo proponiéndole trabajar para él y ser una de las jugadoras del torneo internacional más grande e importante del año. Dicho está que a Énika le parece estar viviendo un sueño: de la noche a la mañana, ¡su vida termina dando un giro de 360 grados! Sin embargo, lo que descubre más adelante es que no todo es color de rosa como pensaba, sino que el trabajo encargado consiste en algo mucho más peligroso que meterse en la competencia: atrapar a otro hacker con las mismas habilidades que ella. ¿Podrá entonces participar de los juegos sin ser detectada por el enemigo? ¿Es lo suficientemente buena como para cumplir con su trabajo mientras intenta proteger la seguridad de su equipo y de su propio jefe? Y lo más importante, ¿por qué el enemigo parece estar detrás de Hideo?


“Todas las puertas cerradas tienen una llave”.

(Lu, 2017. Pág. 38)


Con respecto a las similitudes con Real Player One, mientras que en dicho libro la realidad virtual es un fin en sí mismo – y hasta podemos decir de que se trata de un personaje más en la historia – en Warcross no sucede así, sino que el juego funciona como medio para desarrollar la trama detectivesca del gato y el ratón. Los avatares en Real Player One son totalmente inventados y cada jugador puede ser quien sea, no sabiendo la identidad del personaje con el que estás interactuando. En Warcross, cada jugador tiene un avatar con sus mismas características físicas, con leves diferencias, como es el caso de las armaduras, las armas, los “poderes” que usan para ganar ventaja durante el enfrentamiento, etc. Por lo tanto, no es una versión tan “libre”, y el juego no es totalmente ilimitado ni deja lugar a la exploración o a desentrañar misterios escondidos: el escenario o “round” ya se encuentra armado y se reduce a una competencia, lisa y llanamente, entre dos equipos.

El libro es de una longitud medianamente extensa, pero está escrito con un ritmo tan atrapante y vertiginoso que, con sus capítulos cortos y concisos, te dejan con ganas de saber qué es lo pasa en el siguiente. Tuve el placer de leer la edición en español de VRYA Editoras y es preciosa. Es una historia con acción, suspenso y una pizca de romance que te sumerge en un mundo futurista del que no quieres salir desde que empiezas a leer.

Soy fiel admiradora de la autora, a quien conocía anteriormente por sus dibujos y animaciones. Siempre me gustó su manera de escribir y de crear historias y, sobre todo, de inventar personajes fuertes y complejos. A decir verdad, no sabía con qué me iba a encontrar cuando me compré este libro pero, al venir de la genia de Marie Lu, supe que iba a ser algo bueno, ¡y no me decepcionó en lo absoluto!

Para los que gustan de leer distopías, lo súper recomiendo. ¡¡No puedo esperar para leer la segunda parte!!


“Este es, exactamente, el momento que justifica una cacería: cuando los fragmentos que fui descubriendo convergen en un punto perfecto, cuando veo a mi objetivo físicamente delante de mí, como una fruta madura por cosechar. 

Cuando armé el rompecabezas.

Te atrapé”.

(Lu, 2017. Pág. 20)


VALORACIÓN:  




No hay comentarios:

Publicar un comentario

-RESEÑA- "La pasaespejos 1 - Los novios del invierno", por Christelle Dabos

  "Leer un objeto requiere un poco de uno mismo para cederle el lugar al pasado de otro. Atravesar los espejos requiere enfrentarse a u...